Hijo de un procurador de los Tribunales de Justicia de Valencia, Manuel González Martí estudió Derecho en la Universidad de su ciudad y Bellas Artes en la Real Academia de San Carlos. Tuvo diversos intereses ya que fue ceramista, profesor, investigador, crítico de arte y caricaturista. Con dieciocho años comenzó a estudiar y coleccionar cerámica participando en 1907 en el descubrimiento de los restos arqueológicos de las alfarerías medievales de Paterna. En 1911 obtuvo una  beca para viajar a Roma y estudiar los azulejos valencianos de las dependencias del Vaticano y, en 1914, se incorporó como profesor en la recién creada Escuela de Cerámica de Manises, centro que dirigió –exceptuando el paréntesis de la Guerra– entre 1922 y 1947.

Como ensayista, crítico e investigador publicó artículos en El Correo, Valencia artística, La Esfera de Madrid, El Mercantil Valenciano, Las Provincias o Archivo de arte valenciano, así como las monografías Goya en Valencia (1914), Las tablas de los pintores Llanos y Almedina, del siglo XVI (1915), Pinazo: su vida y su obra (1920), Cerámica española (1933) o Cerámica del Levante español (1944-52), entre otras. En 1924 fue nombrado Delegado de Bellas Artes de la Provincia de Valencia y, entre 1940 y 1955, ejerció como director del Museo de Bellas Artes de su ciudad y Diputado provincial de Cultura (1949-1950). La donación de su colección de cerámica al Estado en 1947 dio lugar a la creación del Museo Nacional de Cerámica, centro del que fue director vitalicio.

En 1897, usando el seudónimo “Folchi”, se inició en la caricatura en las revistas Cascarrabias (1897), Arte Moderno (1899), Valencia Artística (1903) e Impresiones (1908), de las que también fue fundador y director. Por sus ilustraciones logró la medalla de oro en la Exposición Regional Valenciana de 1909 y la de plata en la de Barcelona de 1911. También ilustró cuentos, como su texto Els novios de la peña vèrda (1914). Desde 1901 fue colaborador de Madrid Cómico, donde publicó caricaturas para su portada y viñetas cómicas en su interior.

José Francés destacó en su estilo una primera fase donde la claridad mediterránea queda matizada por la influencia francesa, inglesa y alemana. Los críticos que han estudiado su obra coinciden en señalar que fue en su etapa de madurez creativa cuando Folchi alcanzó su estilo propio, caracterizado por caricaturas elegantes de trazo simplificado que destilan un humor positivo y refinado.

Obras de Folchi en el Museo Lázaro Galdiano

Retrato del escritor y diplomático Enrique Gaspar y Rimbau (Madrid, 1842 – Olorón, Francia, 1902), autor de obras de teatro, zarzuelas y novelas. Este dibujo fue portada de Madrid Cómico el 31 de agosto de 1901, tres meses después del estreno en el Teatro de la Zarzuela de la obra de Gaspar La tribu salvaje.

Retrato de medio cuerpo de Teodoro Llorente Olivares (Valencia, 1836-1911), el poeta más destacado de la Renaixença valenciana, además de periodista, senador y diputado. Este dibujo fue la primera portada de Folchi para Madrid Cómico y apareció en el número del 3 de agosto de 1901.

Texto: Carlos Sánchez Díez / Ayte. de conservador del Museo Lázaro Galdiano.

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