En la Armería del Museo Lázaro Galdiano –vitrina 20.3 (Arma joya)-, se expone dentro de su estuche una escopeta de caza de María Cristina de Borbón junto con sus accesorios que llama la atención por su belleza (Fig. 1).
![Fig. 1. Juan Francisco Gutiérrez [caja y llave]; Ramón Zuloaga [cañón]. "Escopeta de caza de María Cristina de Borbón". Madrid, 1830-35. Acero, madera, asta, textil, hierro y hueso. Inv. 968 Fig. 1. Juan Francisco Gutiérrez [caja y llave]; Ramón Zuloaga [cañón]. "Escopeta de caza de María Cristina de Borbón". Madrid, 1830-35. Acero, madera, asta, textil, hierro y hueso. Inv. 968](https://museolazarogaldiano.files.wordpress.com/2020/07/escopeta_caza_maria_cristina_borbon_museo_lazaro_galdiano.jpg?w=1024)
James D. Lavin (Goya, 1986, nº 114-115, pp. 119), la consideró un ejemplar destacado de la industria armera madrileña de hacia 1830-1835 tanto por su cuidada factura como por su riqueza decorativa, cincelada y dorada. La caja está firmada por Juan Francisco Gutiérrez (Fig. 2) y el cañón, de acero damasquinado, lleva el punzón de Ramón Zuloaga (Eibar, 1768-Madrid, 1848). El estuche de madera forrado con terciopelo se hizo al estilo belga (Fig. 3) y contiene –además de la escopeta– los siguientes accesorios: una turquesa de dos balas y un cortarrebabas separado; una baqueta de acero provista de limpiador y sacatrapos, rematada con figura de niño sobre dragón (fig. 4); un cuerno para la pólvora decorado con medallón grabado –con la figura de un perro rastreando– con gancho para el cinto y cordón de seda y oro para colgar (fig. 5); una cebetera mecánica para cápsulas –cincelada y dorada con palomas– con su cordón de hilo de plata (fig. 6); dos perdigoneras de gamuza bordadas cuya decoración incluye una «M» timbrada con festón a modo de corona y una pequeña bolsa de terciopelo para balas. Faltan el desvolvedor de chimeneas y otro pequeño accesorio.





Según la información y documentación facilitada en 2014 por Miguel Fábregas -descendiente del propietario anterior a José Lázaro- la escopeta perteneció a la viuda de Fernando VII, María Cristina de Borbón-Dos Sicilias (1806-1878), quien se la regaló a su sobrina y ahijada María Cristina Muñoz y de Remisa (1859-1923). Esta era hija de Jesús Muñoz y Sánchez (hermano del segundo esposo de la reina madre), y de Concepción de Remisa y Rafó, segunda marquesa de Remisa. El regalo se hizo efectivo con motivo del nacimiento de María Cristina Muñoz (7-10-1859), pasando a la familia Fábregas-Muñoz al casarse con Antonio de Fábregas y Solá (¿?-1935). El conjunto se vendió en una subasta en Barcelona entre 1925-1935, donde debió de ser adquirido por José Lázaro (Fig. 7).

Enlaces relacionados
Una ballesta de caza de Karl Friedrich, duque de Holstein-Gottorp
Texto de Carlos Sánchez Díez, Departamento de Conservación del Museo Lázaro Galdiano.
Blog creado y actualizado por Jose Mª Martín Écija | Webmaster, Blogger y Community Manager | Museo Lázaro Galdiano.